Bueno que pasa, ¿nadie me va a dar un beso?

domingo, 22 de mayo de 2011

Cuando observo los ojos más atractivos



No había percibido nunca tu verdadera esencia hasta que el otro día me tumbé junto a ti. Y una vez que estaba allí acurrucada y arrullada por tu dulce y relajada voz, y tus historias, todas tan apasionantes y apasionadas, fue cuando me centré en ese espacio tan pequeño, como en los cuadros minimalistas: tu mirada, tu cara, tu sonrisa. Y desde entonces, cada vez que me clavo en tan solo ese pequeño espacio, descubro a un nuevo tú, y un universo de cosas que me hacen sentir, reir, sonreir, y que nunca imaginé que pudieran estar inscritas en ese pedacito tan minúsculo de territorio, que nunca vi cuando te veia de cuerpo entero, o rodeado de otros elementos o personas.

Hay miles de cosas bonitas encerradas en tu sonrisa, y yo no quiero perderla de vista.

viernes, 20 de mayo de 2011

Tecnología humanizada (te lo cojo prestado, niño escritor)


La canción de hoy no tiene nada que ver, pero tiene mucho que ver

9 de la mañana. En un domicilio cualquiera de una ciudad cualquiera un amable cliente franquea el paso a su vivienda a un técnico de una operadora de telecomunicaciones. Previamente han concertado una cita para la instalación de su nuevo sistema de televisión digital por cable. Tras darse los buenos días, el técnico le pide al cliente que le conduzca al lugar donde está ubicado el televisor, que es donde ha de colocar el decodificador.

El cliente le guía hasta el salón y le señala el televisor. El técnico da un rápido vistazo al mueble y con un gesto de aprobación le dice: estupendo, serán 15 minutos. El cliente le dice: si me ayuda retiramos el televisor para que pueda acceder más fácilmente a las conexiones que hay detrás. El técnico considera que su amable ofrecimiento es innecesario, puesto que cree poder apañárselas sin tener que obligarle al engorro de mover el televisor, y declina el ofrecimiento, pero éste insiste: verá como trabaja usted más cómodo.

Así que entre los dos retiran el televisor, del que previamente el cliente ha desconectado cuidadosamente los cables de alimentación, y lo depositan con mimo en el suelo. El técnico saca de la caja el decodificador y un buen puñado de cables que debe conectar al televisor, a la corriente eléctrica y al router de ADSL. El cliente, mientras observa la escena, comenta jovialmente al técnico con un tono de leve queja:

Hay que ver, ¿cuando inventarán algo sin cables...?

El técnico, sin inmutarse le contesta: Ya está inventado.

¿Ah sí? contesta el cliente con renovado interés. ¿Y qué es?

Un libro, contesta el técnico.

Nene, me has hecho sonreír y tú sabes cuánto te lo agradezco en estos difíciles momentos. Y por si no te lo ha dicho el cliente, ya te lo digo yo: ¡eres un cabrón malafollá!

miércoles, 18 de mayo de 2011

Susana



Voy a guardar en esa cajita forrada de terciopelo que tan poco me gustó siempre, nuestra última tarde, preciosa, en la que tuviste ese fugaz instante de lucidez. En el que viste a tu tesorito convertida en una exitosa mujer de 34 años. En el que conociste a una preciosa nieta que se llama exactamente igual que tú, porque tu hija hace con los apellidos lo que le da la gana, y saca la tijera y corta y pega a su antojo, que por eso hoy lleva tus dos apellidos con orgullo por todo el mundo y tiró a la puta basura el que le estorbaba. Mi nombre es el que tú siempre quisiste, mi divisa la tuya, tu amor y tus te quieros están tatuados en el envoltorio de mi corazón.

Se que tal vez lo haya hecho muy mal, pero al igual que tú, no vine enseñada. Hemos tenido nuestras trifulcas, pero creo que puedo afirmar sin temor a equivocarme que el mayor honor del que he gozado en mi asquerosa vida ha sido el de ser tu hija.

Adios Susana, adios. Todos dicen que se me da bien, pero hoy no encuentro las malditas palabras para expresar todo el amor que te llevas a donde quiera que vayas.

lunes, 16 de mayo de 2011

Niño escritor


En premio por tu dedicación y seguimiento incondicional, hoy la entrada es un regalo para ti. Es un video que tiene una significación especial para mí. Disfrútalo.

Hasta en el más oscuro de los infiernos, hay un ratito para el relax.

miércoles, 11 de mayo de 2011

¿Qué tendrá?

¿Qué tendrá? ¿Qué tendrá ese chico, que a todos gusta? ¿Qué tendrá?

lunes, 9 de mayo de 2011

Los Rodriguez



Buenas noches, señora Rodríguez, ¿está el señor Rodríguez? No, señor Rodríguez, pase usted. Pues mire, es que la señora Rodríguez tenía turno de noche hoy en el hospital, y me he dicho, vamos a hacerle una visita a la señora Rodríguez, que igual está de Rodríguez y se siente sola. ¡Claaro, señor Rodríguez, y ha hecho usted muy bien! Precisamente el señor Rodríguez se ha ido hoy en viaje de negocios y no volverá hasta el viernes. Eso me parece genial, señora Rodríguez, porque así podremos usted y yo pegarnos una nochecita de esas que -usted me entiende, señora Rodríguez- a nosotros nos gustan ¿verdad? Claro que sí, señor Rodríguez, claro que sí que le entiendo. Ande, señor Rodríguez, acérquese usted más y acariciemé por aquí, que desde que el señor Rodríguez salió por la puerta esta mañana sin decir ni adiós, me siento muy sola.

domingo, 8 de mayo de 2011

How do you sleep?



Sandra era una mujer muy normal, amante de la lectura, de cifras y letras, de los paseos en bici y del cola-cao con galletas. Desde siempre supo que había que trabajar duro para ganarse esas pequeñas ilusiones materiales e inmateriales que componen una vida, y en las que ella, confiada e ilusionada, se embarcó: una familia, una vivienda digna, un coche y posiblemente unas vacaciones en la playa.

Hoy han encontrado su coche en el fondo de un acantilado, cerca de esa playa que a ella tanto le gustaba, despeñado desde 80 metros de altura. Su cadáver estaba reconocible gracias al DNI que portaba entre sus efectos personales. Todo parece indicar que fue un accidente, aunque yo sé que no, porque planeaba con mis alas sobre su coche en el momento que se salió de la carretera, intentando hacer algo por ella, aunque no pude salvarla. Y vi cómo ella dejaba deliberadamente que el coche se saliese por el lado izquierdo del carril para caer al mar, aunque ni eso pudo conseguir, porque ni al mar llegó.

Nunca fue una mujer de carácter fuerte, y la agobiaban sobremanera los contratiempos. Ultimamente había perdido el sueño, no podía soportar más la presión, las cartas, las llamadas, el banco, el abogado de su ex marido, la hipoteca, el borrador de la renta, la financiera del coche, los cobradores del frac, estaba desesperada, desquiciada, así que decidió que probablemente sería lo más oportuno que su seguro de vida resolviera el futuro de sus dos pequeñas.

Ella sólo quiso hacer las cosas bien, y no comprendía cómo podían habérselo arrebatado todo sin más, porque ella no tenía la culpa de nada. La culpa, toda la culpa, la tiene USTED, aunque yo sé que a usted eso le suda la polla, pero no por eso la culpa deja de ser suya, y por eso yo, deseo desde lo más profundo de mi alma que le pese a usted para el resto de su puta vida.

jueves, 5 de mayo de 2011

El vacío




Y en aquel momento quise encaminarme por la vereda donde se perdieron todos los pasos que nunca dimos, pensando que encontraría todos esos tesoros allí acumulados, esperándome. Pero fue un error. Sólo encontré un viejo desvan atestado hasta el techo de silencio, flores mutadas de colores muy extraños que yo no conseguía reconocer, colores vivos y bellísimos y un aroma profundo a lárgate de aquí. Princesas Disney quemándose a lo bonzo, perros falderos con dientes muy afilados, y buzones reventados de cartas de las cuales ninguna era de amor.

Y entonces lloré.

Perdóname mamá, lo siento tanto... Me quedaré aquí contigo, cogiditas las dos de la mano, hasta que tu cuerpo se marche también.

Se acabaron los viajes, se acabó la ambición, se acabó la estupidez.